Cómo Seguir el Camino de tu Mente Despierta

Querido amigo y amiga,

Hoy quiero decirte que hay esperanza para la lucha diaria que tienes con tu mente. Porque al fin y al cabo, todo desconsuelo, toda rabia y todo malestar, por pequeño que sea, es causado por un bloqueo a nivel subconsciente, el cual hizo una asociación con un momento de tu pasado que te ha traído ese malestar que tanto te preocupa. 

Las agresiones que sufres, por parte de tu familia, pareja, conocidos y desconocidos, es algo que a nivel subconsciente también has buscado, (incluso has deseado que te ocurran). ¿Qué acabas de sentir al yo decirte esto? Rabia? has pensado: vaya estupidez? Cómo voy a buscar que me agredan, cómo voy a buscar pasarlo mal, estas loco? 

La culpa es como la droga

La culpa es como la droga, si tomas un poco un día, no pasa nada. Pero si sigues la senda de su arbitrario despliegue caótico que endulza tu mente, desearás no pensar en otra cosa salvo en tus remordimientos.

Y si te digo que estás deseando pasarlo mal porque sientes una culpabilidad tremenda por un hecho de tu pasado?, por una situación que viviste quizá en tu infancia y que no deja en paz tu tranquila existencia? Pues amigo mio, o amiga mia, cuando estes dispuesto a soltar de verdad ese remordimiento, esa desdichada imagen de ti, a ese ser herido, darás el siguiente paso para un nuevo capitulo de tu vida. 

Un capítulo en el que te pasen cosas buenas, en el que tu imagen en el espejo sea la salvadora de tu vida. Porque, que hacemos los humanos? buscamos siempre fuera “algo” que nos salve. Un famoso al que idolatrar, un gurú que nos diga qué hacer para alcanzar nuestro máximo potencial, un sacerdote que nos libre del mal...

Y donde estás tu en esta ecuación? en qué lugar se encuentra tu persona como para ir siempre en pos de algo, de alguien. ¿Y si lo único que necesitas es sentir más y escuchar menos? Oir tu vibración interna, en lugar de oir el ruido externo. Por qué te olvidas de ti cuando todo lo que siempre quisiste te pide a gritos ser escuchado?

En tu interior está la llave. Es algo que se dice mucho, que los libros que has leido han repetido. Y cómo encuentro esa llave? Quizá simplemente es tan simple como sentarse, o tumbarse, respirar, y esperar una voz que sale de ti. Y cuando escuches de verdad, en la calma, en tu refugio que olvidaste y que siempre estuvo en tu pecho, oirás alto y claro qué camino seguir en este preciso momento.

Te propongo la siguiente meditación, para escuchar esa voz interna, hagámosla juntos:

Tumbado o sentado muy comodo, cierra los ojos y respira hondo 3 veces, siente tu cuerpo sobre el lugar en el que estás, siente los latidos de tu corazón, siente el aire que entra por tu nariz, siente tus parpados cerrados. Y ahora, con un sonoro pensamiento en tu mente, di conmigo: “Vida, que tengo que ver, que aún no he visto?, espera unos momentos a que la respuesta llegue, espera, siente tu interior brotar como un rio desde una montaña alta, siente el agua cristalina que es tu sangre que baja y sube por tus venas. Siente esa respuesta en ti. 

Di conmigo, soy un ser de luz, que está en este mundo para disfrutar, para jugar y para amar. Porque lo único real y que me da alegría, es el amor, el amor real, el amor incondicional a todo y a todos. Porque el que está enfrente mio soy yo, y el que me juzga soy yo, y cuando juzgo me juzgo a mi. Y ya no quiero volver a sentirme juzgado, no quiero volver a sentirme sin valor. Por lo tanto, ahora doy valor a la persona que tengo en frente, doy amor a las personas que me juzgan, me critican, con las que estoy incomodo, porque ya no quiero sentirme incomodo conmigo mismo, ni quiero juzgarme más a mi mismo. 

Me libero de la culpa, me libero de las cargas, soy amor, por lo tanto, siempre me he dado amor aunque lo haya olvidado. Eso no significa que tenga que rodearme ahora de personas que me incomoden, que me produzcan malestar. Simplemente ahora me cuido, y me regalo a mi el don de valorarme y amarme. Respira profundamente 3 veces. Siente tu peso en el lugar donde estás, en la cama o en una silla, y di conmigo: Me amo en todas mis formas, cuando estoy feliz, y cuando estoy triste, cuando algo va bien y cuando no. Ya que si quiero amar mi existencia, debo aceptar todos los polos.